Goey, el día de hoy un chico de me mandó un audio de más de 30 minutos contándome de su vida y de la manera que podemos hacer para vencer la distancia entre él y yo y para poder tener una relación. Me dijo que eso de la distancia no era impedimento, que no lo pusiera de pretexto para poder conocernos, que él podía venirse a vivir acá o que no tenía problema con que yo me fuera a vivir para allá. También tocó el tema de adoptar un bebé o de engendrar uno con ayuda de un vientre alquilado. Goey, tantas cosas de su vida que me contó, tantas opciones que me dio, pero lo más impresionante fue la forma en que todo lo que dijo encaja con lo que quiero. Es como si Dios o alguna fuerza del universo estuviera mandándome lo que había anhelado. Siempre he dicho que quiero mudarme a otra ciudad más grande y era muy lejana y borrosa la idea de adoptar un bebé junto a un hombre con el que pueda formar una familia. Pareciera como magia o como si hubiera estado leyendo mi diario.
Por mi parte siento un poco apresurados todos esos temas que abordó, porque ni siquiera he tenido tiempo de ver si me gusta, no sé si exista química entre él y yo, no sé si exista la chispa y no sé si pueda yo gustarle a él enteramente, porque una cosa es vernos por fotos, y otra muy distinta es estar frente a frente. La cosa es que casi no lo conozco, solo de vista; no he platicado mucho con él, pero me pide que le de una oportunidad de conocernos sin poner como pretexto la distancia, que ya platicando y conociéndonos veremos si se arma o no se arma. No sé qué le diré. Aún no he tenido tiempo de pensar.
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