domingo, 15 de marzo de 2009

Desesperación

Inicio del mini puente. Ayer quise ponerme a hacer la tarea pero, todo estaba raro. Mi cabeza no dejaba de divagar y alejarme de lo que me compete. Ya para la noche me di cuenta que no había avanzado mucho al trabajo. Luego abrí mi menssenger y empecé a platicar con Nequicio; él andaba cariñoso y me hablaba bonito, pero yo no quería saber nada de cursilerías, me fastidiaba que Nequicio, que es todo mi querer, me hablara en ese plan -muy raro en mí porque normalmente me encanta que me apapachen-, y le dije que no estaba de humor, que no quería saber nada de cositas bonitas. Me preguntó por qué estaba así, pero no sabía qué contestar. Luego de pensarlo un poco, me di cuenta que era por Alfalfa. Era por ese muchacho. No quería que nadie más que él me consintiera y me dijera cosas bonitas, no quería platicar con nadie más que con él y no quería saber de nada más que de él; quizá mi tarde se vio arruinada inconcientemente por eso.

Decidí irme a dormir pues en vez de conversar agradablemente por messenger me empezaba a fastidiar y seguramente empezaba a hacer sentir mal al joven Nequicio. Me fui a mi cuarto, cerré con llave, prendí una vela, apagué la luz, me fui bajo las cobijas y me coloqué los audifonos del reproductor. Luego Vicente Fernandez me hizo llorar:

Aquí tienes las llaves de mi alma
puedes entrar a la hora que tú quieras
para que veas si hay alguien en el mundo
que pueda darte lo que yo quisiera.
Ya he tratado de sacarte de mi vida
yo no puedo quererte limpiamente
pero qué quieres que haga vida mía
si el corazón no ve, tan sólo siente.
Tu boca, tus ojos y tu pelo
los llevo en mi mente noche y día
no me pidas que deje de quererte
después que te entregué la vida mía.

Qué desesperación, en verdad, sentir algo por ti y no poder hacerlo limpiamente porque perteneces a otra mujer.

Luego pensé en llamarle, era casi la 1 AM y no se me ocurría algo mejor. Pero, me había hecho la promesa de no molestarle nuevamente con esto que siento y dejarle en paz; no volver a sonsacarle para que dejara de lado esta locura. Llamarle... si le llamaba escucharía su voz y me rendiría ante ella. Mejor no. Mejor me duermo, me dije. Hice el intento por dormir pero no pude, las letras de aquellas canciones me hacían enloquecer. Mejor le mandé un mensaje.

No sabes cuantas ganas tengo de abrazarte, de besar tu boca y todo tu cuerpo, de sentir tus cicatrices en mis manos, de olerte y dormir al lado tuyo. Esta desesperación por verte me está matando. Sé que suena cursi y que normalmente a ti no te gusta expresarte así, pero, qué diablos!, es lo que siento y no me importa ya nada. He tratado de sacarte de mi mente, en verdad he tratado no quererte, pero veo que es realmente difícil. Lo siento en verdad, pero me está siendo muy difícil mantener mi promesa. Pd: no tienes que contestarme.

Y así, luego de haberle hecho saber lo bien que la estaba pasando, me quedé dormida, sin más. Hoy al despertarme, abrí el celular y había un mensaje de respuesta que me envió unos minutos después, no sé por qué no lo oí:

Gracias por sentir todo eso por mí, y creeme que contigo me siento muy bien. Me gustaría estar contigo. Ya no aguanto, pero te comprendo. Ojalá pudieras romper tu promesa. Siempre voy a estar cuando me necesites. Ojalá te pueda ver pronto. TKM

Ahora, ya no sé ni qué pensar. Llámenme loca, pero a veces siento odiarlo y a veces siento quererlo. A veces necesito tenerlo junto a mí y a veces, como ahora, quisiera nunca haberlo conocido. Verdad que en sus mismas palabras se ve que no le intereso en lo más mínimo?

miércoles, 11 de marzo de 2009

Vaivén

Jaja... Sabía. Lo sabía!!! No resistiría a estar sin mí. O debería decir... no resistiría el antojo de tener mi cuerpecito y de que le hiciera cosillas? Jajaja. Qué diablos estoy diciendo!! Jaja.

Justo ayer en que me encontraba lidiando con unas malditas lecturas que debía leer, empecé a pensar mucho en Alfalfa, a extrañarlo. Eran por aquello de las 11 de la noche cuando había decidido mandar al diablo aquellas páginas y justo por ese instante recibí un mensaje de él.

"Hola niña. Ya sé que te dije que no te molestaría pero te quiero ver. Espero estés bien, nos vemos".
No sé cómo diablos hace para hacerme olvidar todo y hacerme quererlo aún más después de la indiferencia, después de la mentira, después de todo lo que ha sucedido. Y adivinan bien, después de haberle dicho que sería mejor no vernos y bla bla... mi otro yo se emocionó, se alegró de saber que él aún piensa en mí. Y respondí:

"Hola Alfalfa. Qué alegría recibir mensaje tuyo. Estoy bien. Aquí haciendo unas malditas tareas que ni siquiera logro entender ya que tengo la mente muy perturbada. Yo también quiero verte, pero mejor no pidas tregua. Yo sé lo que te digo, no te conviene mezclarte conmigo. Que descanses. Besos. Te quiero".


Jajaja. Lo sé. En parte digo no, pero en parte digo sí. Siempre buscando dejar una puerta abierta, una posibilidad. ¿Por qué hago esto? Unas veces quiero terminar con todo de una vez por todas y otras... Auch, ya no entiendo.

Nos mandamos otros mensajes (ya no pongo nada entre cada uno porque me extiendo un buen):

ALFALFA: "Pues te pido tregua. Déjame platicar contigo ahorita un ratito. Ándale Garambis, te prometo que no voy a hacer nada".

GARAMBULLITA: "De qué quieres platicar? Podemos platicar mañana por msn. Además estoy despeinada y he prometido no volver a sonsacarte".

ALFALFA: "Está bien, disculpa. Ya comprendí que no me quieres ver. Que descanses".

GARAMBULLITA: "Sí te quiero ver, que quede claro. Me encantaría. Pero lo hago por tu bien, compréndeme. No me odies por favor".

ALFALFA: "No te odio, pero cuando te decidas me dices y ahí estaré. Y no te preocupes por mí. Tu tampoco me odies. Adiós. Me encantas".

GARAMBULLITA: "¿Cuándo te decidas me dices? No me la cambies por favor, yo siempre he estado más que decidida, eres tú el que no se decide con esto, lo peor fue que me enamoré como una mensa y tu no tuviste la cortesía de evitarlo. Pero bueno, olvidemos el asunto. Luego platicamos. Te quiero. Que duermas bien. Bye".
Y después de este "me enamoré como una mensa" -seguramente improvisto y bombardeante para él- ya no me contestó nada. Yo sé que le estoy pidiendo que platiquemos luego, pero si él sintiera algo por mí, me contestaría algo así como "yo también me enamoré" o ya tan de perdido "también siento algo", pero no, no respondió nada. Qué hubiera sucedido si en vez de esa frase le hubiera hecho insinuaciones traviesas? Seguro sí me hubiera respondido hasta dar fin. No sé. Esto me lleva a deducir que no hay nada más en él hacia mí que el deseo de tenerme cerca y ya. Qué mal situación.

Ahora lo pienso y lo examino así, fríamente. Quisiera hacerlo así siempre, pero luego me entra la etapa de embobamiento que me hace olvidar todo. ¿Cómo este individuo puede hacer eso?

Otra vez empieza de nuevo esto. O mejor dicho, no sé si lo ahuyente con mis palabras o si empiece otra vez. Esto se ha convertido en un juego. En algo inconstante: un día él está, otro día no.

domingo, 8 de marzo de 2009

Sueño imposible, tú

Tal parece que todo ha acabado. Yo te dije era mejor dejar de vernos con la esperanza de que quizá te dieras cuenta de lo mucho que me quieres al saber que me alejaría de ti, con la esperanza de que dijeras que ahora formo parte de tu vida, que necesitas verme tanto como yo a ti y por qué no, que decidieras terminar con tu novia definitivamente. Pero mientras todo sigue tibio y cálido para mí, para ti, parece ser, que se ha enfriado, quizá nunca se calentó. Quizá solamente me querías calentar y calentarte físicamente.

Diablos! No sé. Sólo sé que me he dado vueltas por la ciudad como en los viejos tiempos, aquellos tiempos en que me paseaba rondando por tu casa para ver si te veía. Pero hoy no estabas y el fin de semana pasado tampoco. Quizá ya no quieres regresar a este pueblo y te has querido quedar en la capital con ella. Quizá sigues muy ocupado con lo de tu tesis o quizá no tienes ni dinero para regresar, pero por qué en tu casa no se ve vida, pareciera que ya no vive nadie. Ah, se me olvidaba que la gente normal se acuesta temprano. Como sea.

Creo que esto ya va en serio. Cómo diablos no me hago a la idea? Hoy por la tarde te vi conectado, estuviste como 10 minutos y luego te fuiste, sin decir nada, ni un hola, ni un cómo te va; yo me lo busque. Bien pudiera hablarte y decirte que seamos sólo amigos, pero la primera vez que quisimos adoptar esa relación de 'sólo amigos' terminamos más unidos que nunca y yo más enamorada de ti. Tengo que ser fuerte. Si en verdad me necesitas o sientes algo por mi... regresarás, y yo estaré aquí para recibirte. Si sucede así espero que no sea demasiado tarde.

Me arriesgo al jugármela así, porque quizá sea tu orgullo el que te esté orientando más y pienses que no me rogarás, o quizá es tu amor hacia ella el que te ha hecho recapacitar y alejarte de mí

Por lo pronto estoy en mi cuarto con un poco de sueño, mañana será otro día de trabajo. De gafetes, de pase de lista y de viaje a la capital. Mejor me duermo.

Hasta mañana flaquillo. Dulces sueños. Te quiero.

He intentado no quererte
poner freno a esta pasión
no me pidas una tregua, por favor.
He intentado no buscarte
pero sé que sabes bien
que adivino tu silueta donde estés.
Piensa en mí cuando estés solo
recuerda bien todas las noches que te amé
tan sólo mis besos calman tu sed.
Llegas tú, sueño imposible tú
hoy seré dueña de tu piel
pero tus besos mienten
¿Quien robó tu amor? Dímelo.
Soñaré tu piel desnuda
te soñaré tan infinito como Dios
cuando tu mundo sólo era mío.
Llegas tú sueño imposible tú
si te amo quizá pierda
si no te amo sé que no ganaré.