Historia de un amor

Como si fuera,
como si pudiera,
como si estuvieras.

Así empezabas,

dando todo y nada.

Yo con ojos ciegos

e inspirada el alma,

pero el corazón latiendo

callado y sin calma.

Casi sin saberlo,
fueron insistiendo
mis ganas de verte...
mientras tu corazón
era casi inerte.

De vuelta la vida

sin nuevas pasiones,

eras tú únicamente

pero en ocaciones.

Y fuiste ráfaga en mis noches,
fuiste como el viento
que se cuela en el coche.
Fuiste la marea,
fuiste luna llena,
fuiste las estrellas,
lindas pero ajenas.
Fuiste terremoto,
fuiste lluvia fresca,
fuiste un diciembre
y primaveras que no llegan.

 Imagen: dxromanus