Claro, el respeto explícito para mí y para Rubí siempre ha existido, pero dentro de las cosas implíticas puedo mencionar comentarios sarcásticos, 
como una vez que Rubí y yo no llegamos a comer porque unas compañeras del trabajo nos invitaron a comer a su casa, ese día la señora (de ahora en adelante señora Champiñón) como que se molestó y nos dijo de manera sarcástica "hasta ahorita salieron de trabajar". 
En otra ocasión no fue nada contra mí, pero la señora Champiñón y su hija hablaban y se burlaban del sobrino de la señora -quien ha vivido con ellos desde pequeño- todo porque él es serio.
Otras veces se trata del hijo de la señora, a quien no le dan ni tantito de crédito o respeto, ni siquiera por el hecho de que ya es un adulto joven y ya es doctor; la señora y su hija le hablan feo y lo tratan como si fuera un tonto, como si las cosas que hace nunca estuvieran bien, constantemente lo critican y la señora constantemente lo regaña. 
Igual que con el hijo de la señora, pasa lo mismo con su mamá, pero en este caso, es sólo la señora Champiñón quien la trata feo no respetando su edad, y aún suponiendo que a la viejecita se le fueran las cabras o no estuviera en su sano juicio por su edad, es por eso mismo es que hay que tratar de entenderla y no alarmarse. 
Eso de que traten mal a las personas me recaga, tanto como un enfermo de diarrea. 
Entre otras cosas, no estoy segura, pero quizá hasta hacen comparaciones entre Rubí y yo:
quien es más callada y quien es más platicadora, quien casi no come, quien lavó primero su ropa, quien despertó más temprano, quien llega, quién se va. 
Esto de ser objeto de comparaciones me repatea, tanto como una patada de caballo en el trasero. 
También, la hija de la señora a veces como que anda enojada, no sé si conmigo o qué pex, pero se le nota. Estaba pensando seriamente en irme de aquí para no tener que ver este tipo de escenas. Pero como aún no me pagan no puedo conseguir un lugar donde salga más barato.
Aquí tengo luz, internet, comida, agua caliente, cama y posibilidad de ahorrarme dinero en viajes, 
pues la hija de la señora va constantemente a la capital y me puedo ir con ella, saliéndome más barato, además en estos momentos de inseguridad es mejor que permanezca con una familia, 
en lugar de estar sola. No sé, tal vez luego pueda irme, cuando tenga ya mi pago y que las cosas en el estado cambien. 
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