jueves, 1 de febrero de 2007

Hace unas semanas

En vacaciones decembrinas:

Yo: Tengo mucha tarea y ya faltan muy pocos día para entrar a la escuela. Um… ¿qué haré?... Ay, luego lo hago.

Entrando a clases:

Yo: No hice la tarea y tuve mucho tiempo en las vacaciones.

En el salón:

Yo: Maestra, ¿puede darme oportunidad de entregar los trabajos hasta la próxima semana? Lo que pasa es que ya los tengo terminados pero se me quedaron en mi pueblo. Fíjese, fíjese, fíjese, fíjese, fíjese.

Maestra: Pues mande por ellos o que se los envíen. Le daré oportunidad hasta el viernes, pues tengo que entregar calificaciones el lunes a primera hora. Si me los entrega después le bajaré dos puntos por no haberlos entregado con puntualidad.

Yo: Voy a ver si me los mandan. (¡¡Seee!!)

Pasado el viernes:

Yo: Chin, eran tantas las tareas de la escuela que no pude hacer los trabajos. La maestra me bajará dos puntos… Nooooo. Ya sé, haré los trabajos más perrones que la maestra haya visto en su vida y de tan chingones no me bajará los dos puntos que había dicho.

El lunes:

Yo: Aquí están maestra, traídos desde el Garambu-Town. Aunque no valgan ya nada, le pido que me los revise, para que vea que sí los tenía y que no eran mentiras eso de que se me habían quedado.

El jueves de la misma semana:

Maestra: Leí sus trabajos. Son muy buenos, muy buena redacción, muy buena presentación. Tiene 10.

Yo: Jejejeje… ¬¬

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Con este post no estoy celebrando mi hueva, ni mis mentiras, ni mucho menos mi farsa. Con este post quiero recordarme que debo ser mejor.

Señor, perdóname por violar el octavo mandamiento. Soy mala, muy mala. Estoy sucia, tengo el pecado. Debo ir a bañarme con petróleo. :(

5 comentarios:

  1. Jajajajajaja ...fue una mentirilla piadosa :P

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  2. Pues los que confian prenamente en sus capacidades academicas, se puede dar el lujo, o gusto de hechar flojera. Bien por ti, la flojera es buena, pero no en exceso.

    Saludos!
    :D

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  3. ¡Huy! ¡Qué suerte! yo estaba acostumbradìsima a hacer eso: flojear y sacar buenas notas... no sé si mi alma se pudrió y dejé de merecer la buena suerte o si de plano sin darme cuenta me fui volviendo de veras floja y poco a poco se desecó mi cerebro. Estas vacaciones apliqué la misma y ya no me funcionó: ahora me traen entre ceja y ceja y ¡qué feo se siente!

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  4. Si! de hecho eso se llama suerte! pero no siempre estara de tu lado... ya hechale ganas jiijii...

    XoxO!!

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  5. ► Noesh: Glump!, así las llamo yo para no sentirme tan mal.

    ► Shinji Ikari: Ni tantas capacidades, más bien solo es confianza, pero aunada a la flojera es muy malo.

    ► Tanúx: Qué mal, yo no quiero que me pase eso, pero es que soy muy desidiosa y creo que pa allá voy.. Nooo!! Tenemos que aplicarnos.

    ► Fla-k: Es cierto, no siempre me saldré con la mía, debo aplicar diferentes técnicas y nuevas estrategias.

    Gracias por sus comentarios.

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