Ya no soy la misma de antes que odiaba los domingos. Ahora los domingos han ascendido de nivel para mí porque es el único día de descanso que tengo en la semana. Desde que he entrado a estudiar la maestría los domingos son la gloria.
Antes para mí los domingos significaban aburrimiento, fastidio, ocio, nada qué hacer, cosas fatales en la tele, nervios porque el siguiente día sería lunes y tener qué hacer tareas... por eso tanto rechazo en aquel entonces, pero ahora que voy a maestría los sábados, sólo me queda libre el domingo y los valoro, acepto, vivo y aprovecho más.. Incluso a veces he llegado a decir "Ya quiero que sea domingo", jajaja..!!
Aunque bueno, no es como que "el mejor día de todos" y "cuánta diversión me proporciona el domingo", NO..!! Acepto que no es así, sólo que ahora he aprendido a valorar este día tan raro.
¿Acaso soy la única babosa que tiene problemas con uno o varios días de la semana?
Pfft. Bye.
Creo que el tiempo no tiene días, y que los domingos son tan valiosos como el tiempo que se nos da.
ResponderBorrarUn abrazo.
Buen punto de vista, quisiera no sentir ningún tipo de influencia por el día en el que esté.. pero así soy yo, muy común e influenciable.. jejeje.. Entonces supongo que os da igual si es domingo o si es martes.. lo que cuenta es aprovechar el tiempo.. Trataré, en verdad, de pensar mucho en eso.. Gracias.
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