En el trabajo:
Yo: (saco una plancha para el cabello en el salón de clases).
Alfredito: ¿Para qué es eso maestra?
Yo: ¿No sabes?
Alfredito: No... nomás he visto que mi hermana tiene una de esa, pero no sé para qué la usa. Yo nada más he visto que se encierra en su cuarto con ella, dura bastante rato encerrada y cuando sale huele a quemado...
Yo: (por dentro) Jijiji.
Jajajaja... nomás de imaginarme la cara de Alfredito, al ver a su hermana salir de su cuarto y notar que huele a quemado. Me imaginaba que para él, la plancha para cabello era un artefacto que los niños suelen calificar como "artefacto raro de las mujeres". Me imaginé su cara de interrogación cada vez que veía a su hermana salir de su cuarto y tras de ella el olor a quemado.. jaja, hasta exageré un poco al agregar dentro de la escena una buena bocanada de humo emanando del cuarto. ¿Por qué no? También quizá se juntaba con sus amigos a tratar de averiguar con espionaje por qué su hermana tenía ese tipo de aparato y para qué lo usaba; tal vez ella tenía un gran secreto que esconder, un secreto perturbador que involucraba quemar algo... o peor aún: ¡A alguien! ...
También me imaginé cosas peores. Cosas cochinas. Jajaja. Pero esa es otra historia. Jaja. Mente cochina la mía. ¿Qué querían? Ps Alfredito mencionó "encerrada, bastante rato, en su cuarto y cuando sale y huele a quemado" me extrapola a otras situaciones más chuscas... jajaja.
Fin.
PD: Y no me plancho el cabello en el salón, sólo que ese día guardé la plancha en mi bolsa por error y por eso la llevé a la escuela.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario